Ralle un pedazo de 5-600 gramos de calabaza amarillo y échela en una sartén con aceite de oliva y cebolla triturada. Caliente hasta que la calabaza se ponga cremosa (esto necesita bastante tiempo).
Guise la pasta "farfalle" (mariposas) y amalguemela con la crema de calabaza, añada queso parmesano rallado, alguna loncha de queso (y, si su colesterol se lo permite, un poco de nata para guisar) y hornee para que se dore.
Sirva caliente. Buen provecho.
Escribanos, publicaremos sus recetas.
Vuelva a la pagina principal