La primera y
la segunda fueron construídas en 1853.
En la
primera
se encontraba
el economato y la biblioteca. Aquí arrivaba el dinero
que mantenía la Congregación en Europa y en el
mundo. Recordamos los hechos principales acaecidos en la segunda.
|
El
26 de Enero de 1854 Don Bosco reúne en esta habitación
los jóvenes Rua, Cagliero, Rocchietti, Artiglia y les
hace la propuesta:
"Con la ayuda de Dios los invito
a formar una sociedad que llamaremos: SALESIANOS".
|
|
Es
aquí donde por primera vez se siente esta palabra: "Salesianos". (MB 5,9).
29 de Octubre
de 1854. Entrando
por la única puerta que existía entonces y que
daba al balcón, Domingo Savio y
su papá vienen a ver a Don Bosco. La primera cosa che
Domingo vió es el cartel
"Da
mihi animas, coetera tolle" (Dadme almas
y llevaos lo demás). |
Don Bosco
le explica que es el lema de su ordenación sacerdotal.
Domingo serio comenta: |
|
"Entiendo aquí no existe
el comercio de dinero sino de almas. Espero que también
mi alma sea parte de este comercio". |
25 de Marzo
de 1855. El
ya clérigo de tres años Miguel Rua, se arrodilla y delante de Don Bosco pronuncia
los votos de pobreza, castidad y obediencia. Es el primer salesiano. En el ángulo
derecho de la habatación se puede ver parte del piso original.
Siempre en esta habitación Don Bosco escribió el
texto de las primeras constituciones de los salesianos. Donde
un día entró un rayo por la chimenea y sacudió
la cama y tirando al suelo el escritorio la tinta se volcó
sobre el manuscrito haciéndo ilegible.
En 1861,el edificio fue prolungado en dirección este.
La habitación de Don Bosco fue transferida hace el este,
que hoy se ve a través del vidrio. La otra sirvió
come oficina del secretario y una pequeña sala para recibir
aquellos que deseaban hablar con Don Bosco.
|
Donde se encuentra
hoy no es su lugar original. Estaba hubicado en la habitación
de Don Bosco. Cuando
no le era posible bajar a celebrar la Eucaristía en el
Santuario, Don Bosco celebraba en este altar, el cual se podía
cerrar quedando como un armario. En Diciembre de 1878, dos jóvenes,
Evasio Garrone y Juan Franchini - que luego se hicieron salesianos
- asistían a Don Bosco durante la celebración de
la Eucaristía y durante la elevación vieron el
rostro de Don Bosco iluminarse mientras entraba en éxtasis,
los pies se |
elevaron
de la tarima quedando así en el aire por un momento. Después
de Misa, mientras Don Bosco tomaba una taza de café, Garrone
le pregunta:
"Don
Bosco, ¿qué le pasó esta mañana?
De repente lo ví más alto
"
Don Bosco lo
miró sonrriendo y le dice: "Bebe un poco de café".
Así con la máxima simplicidad sucedían
grandes cosas en la casa de Don Bosco.
Sobre el diván
que se ve a la izquierda, usando la mesita de madera el 19 de
Diciembre de 1887 Don Bosco escribió sus últimas
palabras. Las escribió detrás de algunas imágenes,
eran pensamientos breves para mandar a los benefactores como
señal de gratitud. Las últimas frases que escribió,
con una grafía ya casi ilegible fueron:
"Quien salva el alma, salva todo. Quien
pierde el alma, pierde todo." |
"Quien
protege los pobres, será abundantemente
recompensado al tribunal divino." |
"¡Qué
grande recompensa habremos por el bien que hayamos hecho en vida!"
|
"Quien
hace del bien en la vida, encuentra
el bien en la muerte." "En
el paraíso se gozan todos los bienes en eterno." |
Las últimas Misas las celebró
en la habitación contigua que sepreparó como capilla.
La cama que
se observa es donde Don Bosco pasó sus últimos
días. Lo suyo no era una enfermedad sino un apagarse lentamente,
como un vela que se consume lenta y completamente.
Durante
su último viaje a Francia, donde iba para "recaudar
fondos" el
doctor Combai quiso
revisarlo y finalmente le dijo:
"Usted
es un vestido muy gastado. Un vestido usado todos los días,
días normales y de fiesta. El único medio para
poder cnservarlo todavía es guardarlo en el armario. Seguramente
entiende que lo que le aconsejo es reposo absoluto".
Don Bosco
le responde:
"Le agradezco
doctor, pero es justamente la medicina que no puedo tomar". |
Don
Bosco murió al alba del 31 de Enero de 1888.
A los salesianos
que se encontraban cercanos durante las últimas horas
de vida les dijo:
"Amaos como verdaderos hermanos. Hagamos
el bien a todos, mal a ninguno
"Decid
a mis jóvenes que los espero a todos en el paraíso." |