En Bari, hace pocos años que hemos adquirido la costumbre de comer, en los días de fiesta, el panettone o los pasteles con crema.
Cuando vivían mis abuelos, como postre se comía la pasta orecchiette junto a queso ricotta (queso fresco y muy suave que pueden sustituir con queso cremoso que no sea ácido) con azúcar. Algo que se puede hacer sin problemas porque es muy sencillo.
Compre queso ricotta de oveja fresca (u otro queso cremoso no ácido), añada cáscara de limón en trocitos muy pequeños y azúcar hasta que esta mezcla resulte ser dulce.
Añada la pasta orecchiette cocida sin sal y mezcle todo con cuidado. Sirva como postre.
Vuelva a la página principal
